¿Te gustaría preparar unas deliciosas láminas de huevo fresco para lasaña? ¡Nada es más fácil!. Solo necesitas una buena destreza, la dosis correcta de ingredientes de muy buena calidad, y seguir los siguientes pasos y tu pasta para lasaña esta lista!
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En el mercado puedes encontrar láminas de lasaña listas para usar, ¡pero la casera es otra cosa! Una vez la pruebas no volverás a comprarlas ya listas. Así que veamos cómo preparar, paso a paso, la lámina de pasta al huevo para lasaña casera!
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Detalles
Porciones: 4 personas
Preparación: 20 minutos
Dificultad: baja
Costo: bajo
Ingredientes
- 500gr de harina
- 5 huevos
- 1 cucharada de aceite de oliva
- Una pizca de sal
Si quieres otra porción solo tienes que agregar cada 100gr de harina 1 huevo.
Preparación de la pasta para lasaña
1 – Verter 500gr de harina en una superficie plana, en el centro de la harina hacer un hueco y agregar los huevos y una pizca de sal. Iniciar a mezclar los huevos son un tenedor. Cuando los huevos se han incorporado agregar la cucharada de aceite y iniciar a amasar.
2 – Enharinar la superficie para que la masa no se pegue. Amasar por 10 minutos hasta obtener una masa suave y homogénea. Luego cubrir con papel film y dejar reposar en la nevera por 30 minutos
3 – Después de este tiempo dividir la masa en 8 partes. Espolvorear cada parte con harina y con el rodillo iniciar a aplanar cada una hasta obtener un espesor de 1mm. Si tienes una maquina para hacer la pasta este procedimiento es mucho mas fácil.
4 – Después de esto cortar en rectángulos las laminas de la medida que prefieras. Y esto es todo tu pasta para lasaña esta lista!
Conservación
Puedes congelar la pasta de lasaña cruda, solo tienes que colocar las laminas sin que se toquen entre ellas en una bandeja. Déjalas en el congelador por algunas horas para que se endurezcan. Luego retíralas y colocalas dentro de una bolsa para alimentos, después vuelve a congelarlas. Cuando quieras usarlas, simplemente sácalas del congelador e inmediatamente cocinalas por 1 minuto en agua hirviendo.
Consejos
Con la masa que te sobra de las laminas puedes obtener pequeños cuadrados que te pueden ser útiles para preparar una sopa.
Mejor si usas una tabla de pastelería para amasar en lugar de la mesa, ya que la superficie rugosa de la madera es más adecuada que la superficie lisa de la mesa.